Con la sanción de la Ley Federal de Educación en 1993 comenzó en la Argentina un ambicioso intento de actualizar el sistema educativo y la enseñanza, que incluyó también a la Historia como asignatura escolar. Luego de un período en el que se impulsaron casi exclusivamente innovaciones en las metodologías sin alterar el enfoque de los saberes sustantivos, en los 90 se partió del papel fundamental que juegan estos últimos en la educación. Después de más de cien años sin que nada de fondo cambiara en la Historia enseñada, renovar los contenidos para acercarlos a los problemas de los que se ocupa hoy nuestra disciplina fue el punto de partida de la transformación . Este cambio fue acompañado por una ampliación del concepto mismo de contenido que, según la difundida caracterización de César Coll, pasó a incluir también a los procedimientos y a las \"actitudes\".
* Párrafo del texto extraído como resumen.
Amézola, G. (2004). Rosas vuelto a contar. La época de Rosas en los manuales escolares de la transformación educativa. Clío & Asociados, (8), pp. 9-27.