Uno
de los mayores problemas que afronta América, específicamente América
Latina y con más precisión, el Perú, es la carencia y —hasta ahora—
dificultad de plantearse una adecuada definición de sí mismo. En consecuencia,
nuestra manera de aproximarnos al mundo y su re-creación discursiva
presentan profundos vacíos. Este ensayo pretende mostrar hipótesis plausibles
acerca del porqué de estas dificultades. Una de tales dificultades acecha
ya desde que planteamos el problema, pues al decir «nuestra manera» ¿quién
se esconde bajo el pronombre posesivo «nosotros»? Como sugería Heidegger,
el quien del ser-en -el mundo (la intersubjetividad) se haya en un estado
abierto, es decir, ese quien ha construido históricamente un mundo hospitalario
se vuelve inhóspito una vez que se presentan dificultades en su periferia y
es necesario ya no salvar el «núcleo duro» del paradigma cultural, sino
establecer
sus límites.
Pisconte Quispe, A. (2003). Las peripecias de Dios en la historia de América: Providencialismo y probabilismo. Letras, 74 (105-106), pp. 1-27.