Cada cierto tiempo se habla del agotamiento de la poesía con los más variados argumentos, como si el milenario encanto pudiera opacarse por las modernas tecnologías o nuevas formas escriturales. La poesía ha resistido sin embargo al vigor de la novela, habitando el centro mismo de la ficción y no se confunde con los soportes de su difusión, vive en las oficinas, en el facebook y en todas las redes sociales. Fernando Cuya en los ajustados versos que publica muestra el espíritu contemporáneo y la potencia de la lírica que todo lo capta y es capaz de continuar representando al ser humano en todos sus caminos y todos sus sueños. (Marco Martos)
* Párrafo del texto extraído como resumen.
Cuya, F. (2014). Poemas de oficina. Lima: Ediciones Vicio Perpetuo Vicio Perfecto
Páginas: 48