En la obra de Aranguren la dimensión religiosa es crucial, cuando la trata desde la perspectiva de los “estudios religiosos” y cuando se ocupa de ella desde la perspectiva ética. En este segundo caso, Aranguren habla de una “ética abierta a la religión”. El artículo trata de mostrar que en este segundo caso se produce una evolución en el pensamiento de Aranguren, en la que cabe distinguir dos etapas. En la primera de ellas la religión se presenta como la culminación de todas las aspiraciones del hombre desde una ética fundamentada en la metafísica. En la segunda etapa Dios aparece como posible respuesta a preguntas abiertas desde una ética hermenéutico-narrativa.
Cortina, A. (2015). José Luis Aranguren. Religión pensada, religión vivida. Isegoría, (52), pp. 167-185