En una monarquía que recibía el adjetivo de católica, resulta comprensible que la religión jugase un papel de trascendental importancia. Pero no sólo desde el punto de vista espiritual sino que, mucho más allá, se convirtió en uno de los pilares básicos de la identidad política y dinástica de los Habsburgo. En base a ello se construyó una compleja concepción teológica de la política para cuya difusión propagandística se movilizaron todos los recursos de la retórica y la persuasión disponibles en la sociedad barroca. En particular, el arte puesto al servicio de la fe se convirtió en útil instrumento como divulgador de toda esa ideología transmitida de manera plástica. Especial importancia ocuparán en este sentido los dos puntales, signos distintivos y aglutinantes místicos que configuraban la Pietas hispanica: la devoción eucarística e inmaculista profesadas por los monarcas de la Casa de Austria. A través ello se articuló un complejo discurso político-confesional y propagandístico que desde el corazón de la Monarquía se irradió también a las posesiones americanas. Se analizan pues en este artículo algunas de las más significativas imágenes en relación con el tema, integrándolas en el discurso político-religioso del momento.
Chenel, A. (2013). Fiesta sacra y poder político: la iconografía de los Austrias como defensores de la Eucaristía y la Inmaculada en Hispanoamérica. Hipogrifo. Revista de literatura y cultura del Siglo de Oro, 1 (1), pp. 57-86.