Desde que se fundara en 1882, y al menos durante toda su primera década de existencia, hasta la irrupción de la crisis financiera de 1890, La Plata fue una tierra de inmigrantes, un enclave condensador de hombres portadores de las más diversas culturas. Allí los italianos tu vie ron una fuerte preeminencia numérica, prevaleciendo incluso por sobre los de origen argentino que, en esos primeros años, no representaban cuantitativamente mucho más que una minoría gobernante con su aparato burocrático encargado de dirigir las obras y dar una organización administrativa a la \"nueva Capital \" provincial.
* Párrafo del texto extraído como resumen.
Vallejo, G. (2000). De los Apeninos a La Plata: los italianos en la construcción de la \"nueva capital\". Anuario del Instituto de Historia Argentina, (1), pp. 153-173.