Reiterada presencia barroca documentan nuestros textos del XVII. Quiero solamente plantearme la sorpresa de una prosa que va aclimatándose con seguro paso y asoma sin titubeos en un libro hasta ahora poco frecuentado, la Miscelánea austral de Diego Dávalos y Figueroa, libro que es algo así como la Silva de varia lección de nuestros albores literarios.
Cisneros, L. (1990). Sobre nuestra prosa colonial. Boletín del Instituto Riva Agüero, Nro. 17, pp. 455-463.