A los cronistas se les ha estudiado y visto de diferentes ángulos. El tiempo no hace mella en ellos, se les analiza, se les estudia y casi siempre algo nuevo se descubre. Se han hecho muchas investigaciones y apreciaciones críticas, a veces ensalzándolos, otras destruyéndolos, acusándolos do plagiarios Io parcializados, pero en realidad las obras de estos pioneros de la historia son un venero inagotable de estudio. Sus huellas serán imborrables y quedarán como fuente de primera mano y siempre serán la piedra de toque en todo lo relacionado con la historia.
*Párrafo del texto extraído como resumen
Lostaunau UlIoa, A. (1972-1974). El cronista Agustín de Zarate. Boletín del Instituto Riva Agüero, Nro. 9, pp. 172-181.