La Fusariosis de la espiga causada por Fusarium graminearum Schwabe es una enfermedad que puede ocasionar pérdidas importantes en los rendimientos de trigo y cebada. En Uruguay, en los últimos años, con el aumento del área de siembra de cultivos sin laboreo y en consecuencia el aumento del volumen de rastrojos sobre superficie, se ha favorecido la sobrevivencia del hongo y por tanto el desarrollo de la enfermedad, aunque la ocurrencia de la enfermedad es muy dependiente de las condiciones climáticas. Diversos autores reconocen que la calidad de deposición del producto pulverizado sobre las espigas juega un rol preponderante en la eficacia de los tratamientos para el control de la enfermedad. El presente trabajo tuvo por objetivo evaluar el efecto de tres tipos de boquillas para la aplicación de un fungicida en la deposición de la pulverización sobre trigo. El experimento se instaló en un cultivo de la variedad Klein Chajá en estado Z 65. El diseño consistió en tres parcelas de 10 x 50 m de largo, con 40 repeticiones, representada cada una por una espiga extraída al azar. Las boquillas evaluadas fueron: abanico plano con aire inducido (AI 11002); abanico plano (XR 11002); doble abanico plano (TJ60 8002). La deposición del caldo fue evaluado en las espigas, a través de la cuantificación del trazador Blankophor BA 267%® por fluorometría. La aplicación se realizó con fungicida compuesto de pyraclostrobin al 13,3% y epoxiconazole al 5%, (marca comercial Opera®,) a una dosis de 1 l ha-1 más el trazador fluorescente Blankophor BA 267%® al 1%. La velocidad de trabajo fue de 8 km h-1, la presión de trabajo de 300 kPa y la tasa de aplicación de 118,5 l ha-1. La boquilla de doble abanico plano TJ60 8002, de gota fina fue la que determinó mayor deposición sobre las espigas, la recuperación del trazador fue 55% superior a los demás tratamientos.
Villalba, J. et al. (2011). Evaluación de la deposición de boquillas de aplicación para el control de Fusariosis en trigo. Agrociencia, 15(2), pp. 69-75.