En
este mundo de creciente regionalización y globalización, para mantener efectivamente
la identidad y soberanía nacionales es necesario participar de manera activa en
la toma de decisiones internacionales que a todos nos afectan. No podemos
permanecer pasivos ante los cambios. Ya pasó a la historia la época en que la
voz de una nación sola se hacía escuchar. Ahora hay que concertar voluntades
para presentar un frente común, para hacer valer nuestros intereses, para dar
nuestra visión particular de lo que acontece en la esfera internacional.
América Latina Hoy, 4(4), pp. 69-70
Año: 1992