La siembra directa (SD) de maíz en Uruguay ocupa solo el 12% de la superficie sembrada, contrastando con otros cultivos de verano como soja y girasol. En predios lecheros el cultivo se ubica frecuentemente luego de verdeos de invierno pastoreados; menores rendimientos en grano con SD, comparado al manejo tradicional con laboreo, ha sido atribuido a fallas en la implantación debidas a la compactación del suelo. Se evaluó el efecto residual del uso o no de paraplow como laboreo sub-superficial en la primavera anterior a la siembra directa de maíz (P-SD vs. SD) y su interacción con una combinación de días de rebrote de la avena post-pastorea y días entre aplicación de herbicida y siembra de maíz dejando el rastrojo en superficie (15+50, 33+32 y 10+12). El tratamiento 33+32 también fue evaluado retirando el rastrojo (33+32-R). El uso de paraplow no redujo la resistencia a la penetración de N-NO3- a la siembra fue incrementada por los días de barbecho químico son interacción con uso de paraplow. Con 15+50 hubo 13 mg kg-1 de N-NO3- en los primeros 0.2m del suelo y 5 mg kg-1 de N-NO3- con 10+12. El paraplow generó mayor número de plantas (45549 contra 52292 pl.ha-1 para SD y P-SD, respectivamente) determinando mayor rendimiento en grano (5015 contra 6192 kg. ha-1). El mejor rendimiento en grano se logró con 33+32, un incremento del 15% con relación a 10+12 en SD y 25% en P-SD.
Ernst, O. & Bentancur, O. (2004). Efecto del laboreo sub-superficial y manejo del barbecho químico sobre la disponibilidad de N-NO3- en el suelo y rendimiento de maíz en siembra directa después de avena pastoreada. Agrociencia, 8(1), pp. 29-40.