Primer poemario de Otilia Navarrete. Fue publicado en 1992, como parte de una colección en homenaje al centenario del nacimiento de César Vallejo. Sobre dicha obra, Blanca Varela comentó lo siguiente: «Alguna vez me he atrevido a decir que la poesía no es una actividad que elegimos por voluntad propia. Al leer los poemas de Otilia Navarrete pienso que no me he equivocado. La poesía es quien escoje (sic), para bien o para mal, a su prole. Cuando en su sensible y riguroso libro la autora dice: “fuí (sic) tocada por el vuelo oblícuo (sic) de unas alas”, o habla de “aquel roce celeste en mis (sus) mejillas”, presumimos que se está refiriendo a “eso”, a la poesía como posesión y al vacío que desplaza su ausencia; vacío que contrariando toda ley, toda razón, condiciona a su ser. Bastaría decir, al concluir la lectura primerísima de “Oscuro Cauce del Agua”, que nos hemos topado con una auténtica y empecinada buscadora de signos en un circo demasiado oscuro, demasiado brillante, donde nadie, sino ella, sabe que no existe la red». Nota: Las páginas de la versión original tienen como sello de agua el famoso retrato de César Vallejo hecho por Pablo Picasso. Dicho sello no ha podido ser reproducido en la versión digital que ahora se ofrece al público en general.
Navarrete, O. (1992). Oscuro cauce del agua. Trujillo: Municipalidad Provincial de Trujillo.