La metacognición es una oportunidad para autoevaluarse y coevaluar o interevaluar en el aula; es una práctica indispensable si optamos por desarrollar la evaluación formativa y no solamente limitarnos a la evaluación sumativa. Por medio de la socialización de los aprendizajes, los docentes podemos impulsar la metacognición en el aula y el estudiante aprende a aprender, percibe lo que sabe y lo que le falta aprender, incrementándose la motivación por aprender más.
Santa Gadea, K. (2009). Evaluación y Metacognición en el aula. Investigación Educativa, 13 (24), pp. 1-15.