Uno de los riesgos que corren las comunidades campesinas situadas en las cercanías de grandes ciudades es la amenaza de invasiones de su propiedad territorial. Es el caso de la comunidad campesina de Jicamarca cuyo territorio comprende 100000 hectáreas y abarca desde las serranías de Lima hasta los límites con Chosica, Huachipa y Carabayllo.
Gutiérrez Galindo, B. (1998). Jicamarca: (Des)control de su territorio comunal. Investigaciones Sociales, 2 (2), pp. 1-16.