La tradición ganadera ha sufrido cambios a lo largo de los últimos tiempos que van desde un repliegue en la explotación ganadera, ocasionado por el incremento de tierras de cultivo, hasta la modificación de las formas tradicionales de crianza en ambientes naturales. Pero la variación radical que sufrió la ganadería a mediados del siglo XX, con la explotación intensiva, la masificación de granjas y la alimentación prefabricada ha generado en la actualidad una de las mayores crisis ganaderas. El mal de las "vacas locas” ha desatado en Europa, sobre todo en Inglaterra, una fuerte crítica por el uso de productos cárnicos en la composición alimenticia de los animales.
Espina Barrio, A. (2001). Culturas ganaderas. Una forma de vida en peligro. Investigaciones Sociales, 5 (8), pp. 1-11.