Puede afirmarse que desde mediados de la década del '50 la sociedad argentina vivió un proceso de creciente conflictividad social y política, signado por la superposición y convergencia de cuatro tipos de crisis: crisis económica (manifestada por el comportamiento cíclico de las variables macroeconómicas); crisis del régimen de acumulación (que se arrastraba al menos desde los tiempos del primer peronismo); crisis del sistema político (que afectaba tanto a las normas que regulan los intercambios políticos como al papel de los partidos y organizaciones representativos de diversos sectores sociales, con la proscripción del peronismo como dato central) y crisis del Estado (que hacia fines de los años '60 y principios de los '70 mostraría de manera aguda su incapacidad para dirigir la sociedad).
Pucciarelli, A. et al. (1997). Proyecto de investigación. Protesta social, crisis política y emergencia de la Nueva izquierda. Argentina, 1965-1975. Sociohistórica. Cuadernos del CISH, 2 (2-3), pp. 1-6.