El trabajo se propone argumentar porqué se define la frontera bonaerense como un espacio políticamente concertado. Para esto se analizan las acciones defensivas practicadas, para determinar que los recursos materiales constructivos y los efectivos militares de carrera fueron insuficientes para proteger la región. Por el contrario, se demuestra que el servicio en las milicias resultó esencial para proteger el espacio y resultó constituyente de condiciones de vecindad que posibilitaron que algunos vecinos-milicianos pudieran acceder a instancias de autoridad. Poderes locales que se desplazaban desde el ámbito urbano, la villa de Luján, a la campaña, espacios de frontera. Para argumentar esto se exponen los conocimientos arribados sobre el servicio miliciano y la estructura -red- defensiva que se organizó en la jurisdicción de Buenos Aires durante la primera mitad del siglo XVIII.
Néspolo, E. (2006). La "Frontera" Bonaerense en el siglo XVIII un espacio políticamente concertado: fuertes, vecinos, milicias y autoridades civiles-militares. Mundo Agrario, 7 (13), pp. 1-27.