Se ha argumentado que América Latina no contribuyó a la modernidad y la expansión de lo que la literatura ha llamado «el Occidente moderno». Sin embargo, en lugar de sólo imitar, reaccionar o ajustarse a los paradigmas de la modernidad (y de la globalización), la región elaboró y creó modernidad durante el siglo XIX e inicios del siglo XX. Esto puede observarse en dos procesos distintos pero relacionados entre sí: la formación del Estado-Nación y la conceptualización de la Nación. Aun cuando América Latina sí miró a Europa y a Estados Unidos (EE.UU.) como posibles modelos e incluso intentó emular algo de su modernidad, ningún país latinoamericano creyó seriamente que podría reproducir a Europa o a EE.UU. Más bien, en el contexto del poscolonialismo, la región fue pionera en algunos de los preceptos de modernidad. El resultado fue, como estas breves comparaciones con Europa y EE.UU. sugieren, un camino distinto a la modernidad que posteriormente, durante el siglo XX, se podía encontrar en otros lugares del sistema global.
López-Alves, F. (2011). Los caminos de la modernidad: comparando a Europa y Estados Unidos con América latina. América Latina Hoy, 57, pp.51-77.