La soledad, los obstáculos que impiden una comunicación verdadera, la infructuosa búsqueda por hallar un poco de paz, son las causales que mueven los personajes de La morado del hastío, personajes atormentados por su propia suerte, que deambulan en una ciudad gris donde se respira sordidez por todos los rincones. Las grandes inquietudes trascendentales en cuanto al porqué de las cosas quedan en el aire; desnudos ante su esencia humana, son entes que intentan forjarle un sentido a sus vidas. Y así, entre el desasosiego interno y la decadencia exterior, surge el hastío, la ventana abierta hacia el túnel profundo y nebuloso, el grito sordo que mina por dentro y que los hará tomar decisiones irreversibles. Con esta novela, Carlos Rengifo, confirma sus dotes narrativas, al describir con cierta crudeza situaciones límite y explorar muy bien el mundo interior de una generación que se ve inducida a caer en el desencanto extremo y el vacío espeluznante, sin otra salida que la autodestrucción. De este modo, hurgando en la conciencia contemporánea, el autor nos presenta el lado oscuro y vulnerable de una juventud insatisfecha, resquebrajada.

Rengifo, C. (2016). La morada del hastío. Lima: Ediciones Altazor.

Páginas: 154