Los ejidos mexicanos son complejas estructuras de propiedad colectiva de la tierra, desarrolladas por el Estado post-revolucionario (1915-1992). El éxito de algunos de estos ejidos ha estado basado en los lazos de confianza entre los campesinos. A principios de los noventa, la liberalización económica y la reforma del Artículo 27 Constitucional en 1992, favorecieron una reorganización de las estructuras del Estado que dirigían el ejido y la reaparición de estrategias individuales de tenencia de la tierra. El ejido de La Antigua (Veracruz) presenta la particularidad de que un 71% de los ejidatarios reaccionaron antes este escenario adoptando el régimen de dominio pleno de tenencia de la tierra. Este trabajo tiene como objetivo analizar la conexión entre esta situación y i) el capital social diacrónico existente en este ejido y ii) el papel de las estructuras e instituciones nacionales en la generación o destrucción de la confianza en los ejidos. El análisis de historias particulares de este ejido ayuda a comparar las estrategias anteriores a la formación ejidal con las devenidas tras la reforma del Artículo 27. Se llega a la conclusión de que la ineficiente coordinación de los niveles micro, meso y macro del Estado, ha generado desconfianza y hecho que los ejidatarios actúen de manera individualista.
Delgado-Serrano, M. & Rentería, C. (2014). La formación de capital social en los ejidos mexicanos. Decisiones sobre las tierras tras el artículo 27 de la reforma constitucional. Revista Internacional de Sociología, 72 (1), pp. 9-33