"="">Durante el periodo en que Juan Manuel de Rosas fue
gobernador de la provincia de Buenos Aires (1829-1852), los propagandistas al
servicio de su régimen construyeron un violento discurso contra aquellos
considerados como el principal enemigo interior: los unitarios. Este artículo describe
en primer lugar las características de dicho discurso, prestando atención a los
rasgos físicos y morales que el rosismo atribuyó a los unitarios, a menudo en
contraposición a los valores defendidos como propios por el régimen. A
continuación se propone una interpretación que subraya las funciones
desempeñadas por el discurso anti-unitario, tales como la “simplificación”
simbólica del enemigo, la justificación del régimen rosista, el fortalecimiento
de la cohesión entre los diferentes grupos que apoyaban a Rosas y la
definición, en negativo, de un sentimiento de identidad colectiva.
"="">
"="">Domínguez, J. (2003). El enemigo unitario en el discurso rosista (1829-1852).
Anuario de Estudios Americanos, 60 (2), pp. 557-579.