La tesis de este libro es que nuestro futuro no coincide con los relatos de Vinge y Maddox entendidos por separado, sino que es una combinación de ambos. Si sólo aceptáramos la distopía de Vinge, dispondríamos de una respuesta obvia y poderosa: Orwell nos dio las herramientas y Stalin la determinación para resistirnos a un Estado totalitario. Tras el 11-S, hemos de vérnoslas con una red espía e invasiva, pero que tiene sus límites. Nuestro futuro no es el control totalitario desde Washington; 1984 pertenece definitivamente a nuestro pasado.
* Párrafo del texto extraído como resumen.
Lessig, L. (2009). El código 2.0. Madrid: Traficantes de Sueños