Las cumbres de Guadalajara y de Madrid permiten que la riqueza cultural compartida tenga la oportunidad de dotarse de voluntad política común. Los intereses compartidos que darán sustento a las cumbres iberoamericanas futuras son la democracia, las tendencias a la homogeneización de las políticas económicas latinoamericanas, su estabilización y ordenamiento en proyectos sucesivos y cada vez más audaces de integración y cooperación económica.
América Latina Hoy, 4(4), pp. 35-38
Año: 1992