En Uruguay las quintas de cítricos están protegidas con mallas naturales, conformadas por árboles altos. Si bien se consigue disminuir la velocidad media del viento, no se logra una disminución de la cantidad de fruta descartada debido al daño por viento. El roce de las hojas sería lo que genera el mayor daño sobre la superficie en las primeras etapas de crecimiento del fruto. Se realizó un trabajo de campo en un cuadro de una plantación de cítricos, en el que se instalaron mallas de manera de lograr una protección parcial del mismo. En las zonas protegidas por estas mallas se apreció un aumento de la cantidad de fruta de calidad exportable. A diferencia de las barreras naturales, cuando el viento escurre alrededor de estas mallas plásticas se produce turbulencia con escalas del tamaño de las hojas de los árboles y aún menores. Se estudió un árbol cítrico en el túnel de viento, con flujos de velocidad media entre 1 m/s y 6 m/s, y de diferente nivel de energía contenida en las estructuras vorticosas correspondientes a longitudes del tamaño de las hojas y menores. Para una velocidad media determinada, cuando el contenido de energía de las pequeñas escalas de la turbulencia era elevado, las hojas se movieron con una amplitud significativamente mayor a cuando el flujo presentó baja energía en las pequeñas escalas de la turbulencia. Esto lleva a concluir que la hoja permanecería alejada del fruto un tiempo significativamente mayor cuanto más elevada sea la energía contenida en las pequeñas escalas de la turbulencia, disminuyendo así la acción mecánica de las hojas y el consiguiente daño.
Cataldo, J. et al. (2011). Dinámicas del viento en quintas de cítricos y daño en los frutos. Agrociencia, 15(2), pp. 29-39.