En Conservación el impacto potencial más grande es la protección del ecosistema entero (la protección in situ), seguido de la protección de comunidades, especie y poblaciones (Soule, 1991). Finalmente, la conservación de materiales biológicos por criopreservación es otra estrategia como bancos de recurso genéticos que pueden proporcionar gametos, embriones, tejidos y cultivos de células como fuentes de información genética. La preservación de células viables in vitro es una tecnología esencial para la biología de conservación (Tovar et al., 2008). El objetivo de este trabajo fue la obtención de tejidos de piel y el desarrollo de cultivos celulares de fibroblastos con el fin de generar un banco de material genético y células de la especie para futuras investigaciones y para la conservación genética.
Puentes, R. et al. (2010). Contribución del mejoramiento genético en bovinos de carne a la mitigación del efecto invernadero. Agrociencia, 14(3), pp. 190.