En respuesta a los cambios en la sociedad y por lo tanto en el mercado, las industrias animales necesitan hacerse ‘limpias, verdes y éticas’ (LVE). Para ser ‘limpias’, las industrias necesitan minimizar el uso de drogas, químicos y hormonas exógenas. Para ser ‘verdes’, las industrias necesitan minimizar su impacto en el ambiente. Para ser ‘éticas’, las industrias necesitan evitar las prácticas que comprometen al bienestar animal. Es importante que las prácticas LVE apliquen a todos los participantes de la cadena industrial, desde los productores hasta los consumidores.
Este artículo presenta nuestra aproximación al manejo LVE de pequeños rumiantes en establecimientos en Australia, un contexto que es directamente relevante para la industria ovina del Uruguay, dado que hay muchos aspectos comunes en el manejo de ganado entre los dos países. Los temas principales son: 1) control del momento de los eventos reproductivos usando señales socio-sexuales (el ‘efecto macho’); 2) ‘alimentación enfocado’ – períodos cortos de suplementación nutricional que son diseñados específicamente para cada evento en el proceso reproductivo; 3) ‘farmacología nutricional’ – la posibilidad de usar forraje que contiene compuestos ‘bioactivos’ para mejorar la salud, la eficiencia y el impacto ambiental; 4) maximizando la supervivencia de las crías por una combinación de manejo y nutrición; 5) selección genética para mejorar la eficiencia reproductiva y la salud animal. Estas herramientas implican nuevas maneras de manipular el sistema endógeno de control de los animales y, muchos de los mismos pueden ser aplicados a sistemas de producción de ganado. Por último, el manejo LVE puede ser rentable, aumentar la productividad y, al mismo tiempo, mejorar enormemente la imagen de las industrias carniceras y lácteas en la sociedad y el mercado.
Martin, G. B. (2009). El Concepto ‘Limpio, Verde y Ético’ en Producción Animal. Agrociencia, 13(3), pp. 1-7.