Las preguntas que el historiador económico se plantea (o debería plantearse) se han ampliado. Resulta más complejo delimitar el campo de la historia económica y, concomitantemente, exige repensar el uso de las fuentes conocidas e incluir fuentes nuevas. A pesar de la dispersión, empero, tal vez sea posible reunir a los nuevos temas de la historia económica en dos grandes áreas o perspectivas: la dinámica de las relaciones de género, la cuestión acerca de la reproducción biológica y social que parte de los crecientes aportes de una literatura feminista, y la internacionalización de las relaciones económicas y sociales.
Hunefeldt, C. (1994). Historia de la familia como historia económica: Temas y fuentes para Lima en el siglo XIX. América Latina en la Historia Económica, 1 (2), pp. 55-64.