Estos autores señalan que la institucionalización de un sistema de partido es importante en el proceso de consolidación democrática en la mayoría de los países latinoamericanos. Un sistema de partido institucionalizado implica estabilidad en la competición intrapartidista, la existencia de partidos con raíces estables en la sociedad, la legitimidad de partidos, elecciones e instituciones, y unas organizaciones partidistas con reglas y estructuras razonablemente estables. También establecen diferencias en el grado de institucionalización y tratan de caracterizar los instintos de los sistemas de partidos en América Latina.
Mainwaring, S. & Scully, T. (1997). La institucionalización de los sistemas de partido en la América Latina. América Latina Hoy, 14 (2), pp. 92-108.