El presente artículo trata de cómo debe ser entendido un currículo integral, en el contexto del concepto de una auténtica educación. Un currículo integral debe tener un continente constituido por las habilidades propias del ser humano: pensamiento, lenguaje, habilidad mecánica y habilidad política. Este continente contiene un contenido, constituido por la totalidad de la creación cultural humana, organizada en: ciencias, tecnología derivadas de ellas y humanidades. A partir de esta concepción, se propone una metodología para realizar la formación profesional universitaria, que sigue esta secuencia: diagnóstico, perfil profesional, áreas de desempeño laboral, estructura del currículo, generación de unidades curriculares, plan de estudios, sumillas y sílabos.
Mejía Mejía, E. (2011). El proceso de elaboración del currículo para la formación profesional universitaria. Investigación Educativa, 15 (28), pp. 1-19.