En el año 1967 la sociedad japonesa se estremeció al conocer los sucesos del apresamiento de un adolescente de nombre Nagayama Norio acusado de asesinar a tres personas en una senda de violencia que devino en la determinación de la pena de muerte, opción válida en ese entonces y aún ahora para el Estado japonés como resolución justa para casos tan graves como los de asesinato. El responsable de los asesinatos era al momento de haberlos cometido un adolescente y al tener en perspectiva la pena impuesta, vale la pena interrogarnos en torno a la validez reñida con los derechos humanos de los niños, niñas y adolescentes de las condenas semi carcelarias o carcelarias y el uso de la violencia para solucionar la violencia adolescente. El presente artículo propone, a partir del análisis de un caso emblemático de condena de pena de muerte a un adolescente, la elaboración de pautas para la praxis social y judicial con poblaciones de adolescentes en conflicto con la ley, la solución definitiva, agotadora del derecho humano, resolutiva de la pena de muerte expuesta como contrasentido de la solución humanitaria responsable, sistemática, basada en el derecho humano.
García Escobar, J. (2010). El caso Nagayama Norio: pistas para una real justicia juvenil. Investigaciones Sociales, 14 (25), pp. 1-22.