Cuando se habla de interpretación y teoría de textos literarios, se hace referencia a las principales tareas en lo que respecta a la comprensión de la estructura del texto novelístico. Resulta cada vez más improbable describir la novela en estos tiempos, debido a la complejidad de este género de la literatura contemporánea ya que la variedad que presenta ésta en lo que se refiere a tipos, dificultan la clasificación convirtiéndose de este modo en algo referencial. Por otro lado, la evolución de este género ha sido violenta entre los siglos XIX y XX; se ha denominado al siglo XIX como el siglo de oro de la novela tradicional (Balzac, Tolstoi, Dostoievski, Stendhal), en cambio el siglo XX se describe como un quiebre en relación al modelo anterior (Joyce, Faulkner, Hemingway). La diferencia es tan notoria que algunos críticos han hablado de la muerte de la novela, y consideran a la gran producción novelística del siglo XX, como algo que escapa a la esencia y rasgos de la novelística clásica. Entre ambos modelos existe una ruptura, pero también una continuidad: el primer modelo crea las condiciones para el surgimiento del segundo. Entrando al texto en sí, se va a proceder a la enumeración y explicación de las alternativas a fin de comprender el mundo estructural novelístico, desde dentro y en forma integral. Debemos añadir, que no siempre estas opciones son excluyentes entre sí, sino que, a menudo, el autor asume varias opciones y con ellas va configurando el universo imaginario y verbal de la novela.
González Montes, A. (1988). Estructura del texto novelístico. Lima: Latinoamericana Editores.