Durante la era independiente, uno de los principales rubros de la economía de la villa y ciudad de Parras, en México, fue la producción de vinos, aguardientes y licores. Durante el último tercio del siglo XIX, la demanda nacional de bebidas alcohólicas creció, aumentando así la importancia económica de Parras. Diversos cosecheros iniciaron procesos modernizadores, y entre ellos destacó la familia Madero. Pero al intentar diversificar las variedades de vitis vinífera, introdujeron al Valle de Parras la filoxera. Las centenarias variedades parrenses fueron destruidas por la plaga, y hubo que introducir la técnica del injerto. Gracias a su opulencia y a su estratégica inserción en redes empresariales y políticas, los Madero lograron sortear la crisis y mantener productiva una de las empresas vitivinícolas más antiguas de México. El presente estudio no tiene por objetivo hacer un tratado del problema de la filoxera a nivel nacional, sino puramente regional, en la época en que Parras era el principal productor de vinos y aguardientes de uva de México.
Corona Páez, S. (2009). El Valle de Parras y el desastre de la filoxera, 1870-1910. Génesis y consolidación de una empresa vitivinícola en tiempos de crisis. Mundo Agrario, 9 (18), pp. 1-19.