La antropología biológica tiene mucho en común con otras disciplinas como la biología humana, la demografía, la paleontología, y hasta la medicina. Tal vez la mejor manera de explicar qué es lo que nos separa de éstas otras disciplinas es la manera en la que los antropólogos biológicos enfocamos nuestras investigaciones puesto que, sea lo que sea el tema de investigación, nosotros lo vemos desde puntos de vista evolutivos, trans-culturales y bioculturales. Por lo tanto, aún si estamos estudiando algo tan clínico como, por ejemplo, el parto, lo vemos desde éstos tres puntos de vista: 1. Evolutivo: ¿Cuál es el papel de la pelvis en la locomoción y en el parto? ¿Cuándo en nuestra historia evolutiva los humanos empezamos a caminar de manera bípeda, así afectando la pelvis? ¿Cómo paren los primates no humanos? 2. Transcultural: ¿De qué manera las familias y los asistentes médicos ayudan a las madres que están pariendo en culturas alrededor del mundo? ¿Es posible que la manera de parir típica de la biomedicina no sea la mejor para la mujer? 3. Biocultural: ¿Cómo es que el estrés de estar pariendo en un hospital afecta el éxito del parto para mujeres que están aisladas de su familia? ¿Podríamos mejorar la salud de madre y bebé incorporando prácticas culturales de la mujer que está pariendo? En otras palabras, los antropólogos biológicos estudian un hecho biológico como una enfermedad o un gen, incorporando información acerca del pasado evolutivo de dicha enfermedad o gen, incorporando información acerca de la manifestación biológica de la enfermedad o gen en diferentes culturas-ecosistemas, y estudiando cómo la enfermedad o gen afecta la cultura donde se manifiesta, y cómo la cultura afecta la enfermedad o gen.
* Párrafo del texto extraído como resumen.
Madrigal, L. & González-José, R. (2016). Introducción a la Antropología Biológica. Introducción a la Antropología Biológica. Asociación Latinoamericana de Antropología Biológica