Ante las acusaciones de despolitización que ha recibido el pensamiento del último Derrida, este artículo se propone mostrar cómo la crítica a la idea de comunidad articula en Derrida una política heterológica que desdibuja los límites tradicionales entre lo ético y lo político. Para demostrarlo se procedará, en primer lugar, a analizar la crítica a lo comunitario y a la “fraternidad” que se desarrolla principalmente en Políticas de la amistad, en segundo lugar se analizará la crítica derridiana a la idea de un mundo común material y/o objetivo, para finalmente exponer las características de la política heterológica en su relación con la muerte del otro y la figura del hijo.
Llevadot, L. (2013). No hay mundo común: Jacques Derrida y la idea de comunidad. Isegoría, (49), pp. 549-566