Además del concepto explícito de cultura como perfeccionamiento de la naturaleza, que podemos reconocer en muchos lugares del corpus kantiano, la entera empresa crítica puede considerarse cultura en un sentido más profundo: cultura como proyección de una subjetividad que busca en la naturaleza los indicios del destino racional y moral del hombre. Según esto, la filosofía kantiana puede verse como una filosofía de la cultura, posible, en última instancia, por la reflexividad de la razón, que advierte sus propios intereses, y configura el mundo conforme a ellos.
González, A. (2014). La filosofía kantiana como filosofía de la cultura. Isegoría, (51), pp. 691-708