Cuando la filosofía emplea metáforas en que la variable sexo es particularmente significativa, nos encontramos ante un interesante tema de exploración para la teoría feminista. El presente artículo se centra en un análisis de las metáforas pertenecientes al campo semántico de lo femenino que han sido utilizadas para la caracterización de la racionalidad postmoderna. En contraposición con las metáforas masculinas de que ha echado mano la crítica de la razón moderna, sobre todo en tanto que razón instrumental (identificadora, violentadora de lo diferente), las versiones debilitadas de la razón que propone el postmodemismo, y de forma característica «il pensiero debole», se relacionan con «las estrategias del débil que remiten a lo femenino como primer analogado ». Razón devaluada, razón feminizada. Así, para Vattimo la razón debe ser piadosa -versus las hermenéuticas crueles- y renunciar a las pretensiones de fundamentación y de totalización, que son dominadoras. La autora evoca al respecto la iconografía de la Pietá como metáfora del no-lenguaje (Kristeva) bloqueado por el «rememorar» del amor maternal. y se pregunta por la utilidad para la teoría feminista de esta «razón feminizada », teniendo en cuenta sus cometidos críticos irrenunciables, como el desbaratamiento de la jerarquización de los géneros. La otra variante que aquí se considera de la feminización de la razón, la razón estetizada, que se plasma en propuestas «narrativas», como la de Rorty, y que descarta cualesquiera orientaciones normativas, no es estimada como la más idónea para la construcción de una «subjetividad femenina fuerte» que vaya contra las definiciones tradicionales.
Molina, C. (1992). Lo femenino como metáfora en la racionalidad postmodema y su (escasa) utilidad para la Teoría Feminista. Isegoría, (6), pp. 129-143