Numerosos investigadores sostienen que la encuesta telefónica realiza estimaciones de voto más precisas que la encuesta personal. A estas alturas nadie duda de las ventajas de la encuesta telefónica en cuanto a la representatividad, calidad de la información recogida, mayor rapidez y menor coste; si bien la encuesta telefónica presenta también importantes inconvenientes. Debemos considerar también la presencia de nuevas barreras que dificultan la accesibilidad (por ejemplo contestador automático); y saturación del medio telefónico por la gran utilización en actividades de publicidad y telemarketing que genera un gran número de llamadas “infructuosas” y entrevistas interrumpidas. El objetivo del presente trabajo es valorar la adecuación de las encuestas telefónicas en la predicción electoral, tratando de detectar si presentan mejoras sustantivas respecto a las encuestas presenciales.
Díaz, V. (2011). Utilización conjunta de la encuesta presencial y telefónica en las encuestas electorales. Revista Internacional de Sociología, 69 (2), pp. 393-416